Neo Carmona
Si
este colectivo está compuesto por académicos, académicas, pensadores críticos,
intelectuales, formadores y formadoras de conocimientos del más alto nivel,
como lo es el profesorado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, se hace
evidente que la calidad del debate y la seriedad de esas propuestas debe
responder a la altura intelectual y cultural del personal docente del
patrimonio social más importante del país.
Lo
contrario a esto, es decir, las mentiras politiqueras con las que fácilmente se
engañarían a obreros y obreras que no tuvieron la oportunidad de formarse es,
sencillamente, tomar a nuestros docentes y nuestras docentes como tontos y
tontas útiles, así como insultar la inteligencia que tantos sacrificios les ha
costado cultivar a través del tiempo y la preparación continua.
Y
es eso precisamente lo que ha venido haciendo el grupo que adversa el proyecto
académico que encabeza el próximo rector de nuestra Universidad Primada de
América, el Doctor Jorge Asjana David. Esto
producto de la desesperación al quedar desnudados ante la familia universitaria
a la que tienen más de siete años engañando con apoyos y números que no
tuvieron ni siquiera en su mejor momento.
Han
sido incapaces de presentar al electorado universitario una opción creíble de
gestión que convenza a la comunidad académica de la idoneidad de su propuesta
para beneficio de todos y todas. Sencillamente, porque en su
concepción de la institución no la ven más allá de ser un medio para la
satisfacción de sus intereses que, por demás, son todo menos compatibles con el
modelo de universidad abierta, plural, democrática y al servicio del pueblo
dominicano que le debemos al Glorioso Movimiento Renovador. Y no de un grupito
como pretenden.
La
docencia, la investigación, la extensión, la transparencia y el manejo correcto
de los recursos, ejes transversales de la gestión universitaria, les son
totalmente ajenos.
No
conocen la gerencia eficaz que verdaderamente redunde en beneficio de una
universidad con presupuesto extremadamente limitado y de gran responsabilidad
social.
Ahora
bien, son expertos en la improvisación sobre todo porque en décadas pululando
en puestos de la gerencia universitaria, inclusive al más alto nivel, no
hicieron más que tergiversar las funciones y responsabilidades propias de sus
cargos para, como único medio de adhesión política, burocratizar los procesos
que les son inherentes a los fines de poder ofertar como prebendas los derechos
adquiridos de la familia universitaria para optar por las facilidades
institucionales que garantizan una vida más digna.
Sabios
en su propia ignorancia, asumen que pueden comprar al personal docente,
inclusive chantajearlo comprometiendo así la institucionalidad del Estado, aún
cuando el presidente Luis Abinader Corona ha dado muestras contundentes de su
interés en propiciar una forma de gobierno totalmente alejada de esas prácticas
malsanas que tanto daño le han hecho a la sociedad dominicana.
El autor es servidor universitario
Una excelente reflexión, la política me has enseñado;a que la victoria se logran trabajando día y noche.
ResponderBorrarTambién no creerme ganador de un proceso, siempre hacer las campaña como si estuvieramos empesando.
En el caso nuestro estamos viento en popas y es comenzando, otros han lanzado todos sus tiro y lo hemos agarrado rendido.