Preservaremos la UASD que hemos logrado
“Quien
tenga miedo, que se compre un gato prieto”.
Refrán
popular
Neo Carmona
La Guerra Patria de
Abril del 1965 inspiró el Glorioso Movimiento Renovador del 1966 el cual, a su
vez, le arrebató nuestra Universidad Autónoma de Santo Domingo a los esbirros
de la tiranía trujillista y nos legó una universidad abierta, plural,
democrática, participativa y al servicio del pueblo; convirtiéndose de esta
forma en el patrimonio cultural y social más importante de la República
Dominicana.
De su permanencia como
la principal institución de educación superior del país, aportando los
profesionales, las profesionales y las propuestas e investigaciones pertinentes
y necesarias que demanda el desarrollo nacional sostenible depende, en gran
medida, por no decir completamente, el futuro de la nación.
Por ende, nuestro mayor
compromiso es preservarla para que las presentes y futuras generaciones
encuentren en ella las mismas oportunidades de crecimiento, preparación
académica e intelectual y de nivelación social que hemos venido encontrando
todos y cada uno de nosotros. Y, más aún, para que podamos acompañarlos en su
inserción con éxito al mercado laboral competitivo y aportar al desarrollo de
la República, hacerla más justa y equitativa, como fue el sueño de los Padres
de la Patria, los Héroes de la Restauración, así como de Constanza, Maimón y
Estero Hondo; y de la propia Revolución de Abril que lideró el Coronel
Francisco Alberto Caamaño Deñó.
Es aquí precisamente
donde radica la importancia que tienen las próximas elecciones a celebrarse el
miércoles 15 de junio. Debemos elegir un equipo de académicos y académicas
verdaderamente comprometidos y comprometidas, del más alto perfil y solvencia
moral que garanticen, representen y salvaguarden los mejores intereses de la
institución.
Solo eligiendo a sus
mejores hijos e hijas para dirigir sus destinos podremos los uasdianos y las
uasdianas cumplir nuestra misión para con el futuro de la Universidad Primada
de América. Y que esta pueda enfrentar con éxito los desafíos que demanda el
panorama mundial actual de la educación superior de calidad, vanguardia y
excelencia; en una sociedad cada día más cambiante y en constantes
convulsiones.
Lo contrario sería
dejarla caer en manos inexpertas e improvisadas en la gerencia, que solo la ven
como una corporación económica para beneficio propio y de sus intereses, a
todas luces ajenos a la naturaleza académica, social, educativa y sin fines de
lucro de nuestra Universidad Primada de América.
Se hace necesario, por
tanto, que reflexionemos profundamente, tanto sobre el modelo de universidad
que necesitamos afianzar, desarrollar y que la nación dominicana requiere para
consolidarse, como de aquel modelo que jamás podemos permitir asuma la
dirección de la academia pues, sin lugar a dudas, significaría su aniquilación
total, así como también de los más grandes anhelos de libertad y de progreso de
la sociedad que tanto espera y necesita de nosotros.
Hoy podemos decir con
orgullo que, gracias al trabajo y dedicación de nuestras actuales autoridades,
encabezadas por nuestra rectora magnífica, doctora Emma Polanco Melo, y demás
miembros del Honorable Consejo Universitario, la UASD se ha fortalecido
institucionalmente, ha recuperado su imagen pública así como la confianza del
gobierno y de los diferentes estamentos de la sociedad civil, que había
perdido, precisamente, con el concurso entusiasta de la gestión incapaz e
irresponsable de quienes hoy intentan a toda costa convertir nuestra
institución en su plataforma económica y de enriquecimiento por excelencia. Y,
con lo bien que les fue a algunos en el pasado reciente, no es para menos que
lo pretendan.
Por suerte, contamos con
un líder como el Doctor Jorge Asjana David. Un académico puro, formado en las
aulas de nuestra universidad, desde donde sigue formando profesionales del más
alto nivel y competencias. Un profesional de prestigio, con el más amplio
reconocimiento de sus pares; un verdadero gerente académico, fruto de una
trayectoria impecable, transparente y en defensa siempre de la
institucionalidad y reglamentaciones internas.
Con Jorge Asjana,
acompañado de la Gran Alianza Nacional, integrada, principalmente, por sus
cuatro vicerrectores: Doctora Rosel Fernández Lerebours, Docente; Maestro Alexi
Martínez Olivo, Administrativo; Ingeniero Amparo Céspedes Hidalgo, de
Investigación y Posgrado; y Doctor Bautista –Radhamez- López García,
de Extensión; todos con impecables trayectorias académicas, gerenciales y
sociales, decanos actuales con importantes logros que exhibir en beneficio
de la UASD y la sociedad. Pero, además, compuesta por los universitarios y
universitarias de buena voluntad a quienes nos duele la universidad y su
prestigio, seguiremos defendiendo este patrimonio que es nuestra Universidad
Primada de América.
Sabemos que nos
enfrentamos a un poder sin escrúpulos, lleno de las más bajas pasiones y capaz
de cualquier cosa con tal de lograr sus malsanos objetivos. Pero no tenemos
miedo, tenemos la verdad y la dignidad de nuestro lado.
Así como los derrotamos
aquella vez, lo derrotaremos en esta ocasión, de forma más fuerte y
contundente.
Y se los voy a
demostrar.
El autor es servidor
universitario