i
Hay historias que es
preciso dejarlas morir,
como la de aquel niño al
que jamás podremos regalarle flores.
También debe morir el
tiempo que ya no recordamos
junto a las copas de vino
que se perdieron en Milano.
Pero lo más importante que
debe morir es ese Río,
inmenso bajo la única
lluvia eterna del Jueves Cristo.
ii
(Un niño sin flores, un
amor sin niño:
¡Qué triste!)
Neo Carmona