“Si, una persona quiere habitar en un lugar feliz, en un poema”.
Mary Oliver
Si este fuera un poema, sería una casa
triste,
sin fotografías y dibujos en la nevera,
perros que se comen los zapatos y gatos
que siempre hay que recoger en las
noches.
Seguro que no tendría chimenea: ¿para
quienes?
¿En cuál mejor invierno que este
solitario?
Tampoco tendría los niños que van
creciendo
por
las paredes,
que odian ir a la escuela y prefieren
dulces a los vegetales y a los frijoles.
Si este fuera un poema, sería una casa
triste,
sin un buzón lleno de sobres y revistas.
No tendría recuerdos de las últimas
vacaciones
en España ni un comedor para las cenas.
Si este fuera un poema, sería una casa
triste,
sin una cama grande para las noches de
amor
y recibir a los niños en las mañanas de
domingo.
Pero este no es un poema, es el presagio
de una casa
muerta.
Neo Carmona
.-